UN CANTO IMBORRABLE...!!

¡¡…Y fue este mismo día, hace exactamente un año, en que el cielo tucumano le dejó su adiós a dos grandes de la música argentina, en un amanecer distinto con la naturaleza del campo y los cerros como testigos de las lamentables pérdidas. Ricardo Benjamín Romero y Héctor Hugo Bulacio perdieron la vida cuando el Renault Megane en que viajaban rumbo a Tucumán fue embestido por un tren de carga en el paso a nivel a la altura de la ciudad de San Cristóbal, en la ruta 13, a 175 kilómetros de Santa Fe. En el accidente sobrevivieron Carlos Sánchez, quién manejaba el auto, y Roberto Pérez. “El retiro aún está lejos. Todavía no hemos pensado en dejar de cantar, tenemos muchas canciones para dar. Pero quién sabe si grabamos un nuevo disco…”, comentaba Romero en el auditorio mayor de Radio Nacional Folklórica dos días antes en los recitales de SADAIC...!!

El origen y la historia de este conjunto de estilo único comenzó con el Trío Los Ases, grupo que le dio la base a Los Tucu, conformado por Romero, Bulacio y Santiago Jerez , allá en 1959. Luego se llamaron Las Voces del Surco con la incorporación de Carlos Paliza. El nombre que los hizo mundialmente famosos se originó en Buenos Aires por propuesta del director artístico discográfico, Víctor Buccino. El primer material se llamó Los Tucu Tucu, ex Voces del Surco y “Tu eres joya inmensa”; fue el corte difusión. El trabajo de voces armonizadas delicadamente, el amplio repertorio y la música melodiosa fueron las claves para que el grupo comience a ganarse un lugar en el ambiente folklórico pero ya sin Jeréz, y sí con la primera voz de César Manuel Martos, en 1965.

En esta década, con el tema “Tristezas del porqué”; llegó a su primer pico de éxito al ser considerados el mejor conjunto de folklore y además, el mejor extranjero en Chile. Las giras al exterior comenzaron en la década del 70´ gracias a la difusión del disco “Los Tucu Tucu” y llevaron su música por Francia, Rusia, Alemania, Holanda, Italia, Estados Unidos y España, país en que se consagraron con el primer premio en el Festival Folklórico Internacional. En 1973 parecía que la suerte de estos tucumanos se acababa cuando se separó Coco Martos para formar Los de Siempre con Daniel Altamirano y Julio Sáenz. En su lugar Carlos Sánchez asumió la difícil responsabilidad de reemplazar a la primera voz, pero sorprendentemente la gente los seguía reconociendo. Con esta formación logran el Camín Cosquín en 1975 y el primer disco de oro. Dos años más tarde Paliza abandonó el conjunto y en su lugar llegó Roberto Ángel Pérez. Con esta formación llegaron en la década del 80´ y 90´ a lo más alto de la carrera, tocando por América, en la Ex Unión Soviética y ganando infinidad de premios como Premio a la Trayectoria en el Festival de la Tonada (Tunuyán, Mendoza), Premio SADAIC a los Grandes Intérpretes (1992), Caballeros del Folklore en Cosquín (1993), el Discepolín Porteño (1996), Premio Cóndor (1997), reconocimiento del Congreso por el aporte a la cultura (1998), por nombrar algunos.El accidente sólo fue una circunstancia de la vida, como lo fue con otros grandes del folklore argentino, pero indudablemente, la música de Los Tucu Tucu seguirá siendo camino y fuente de muchos que entiendan y aprecien el estilo de estos consagrados.

Se rumoreaba sobre el comienzo del dúo Sánchez-Pérez o de la vuelta de Los Tucu Tucu con los sobrevivientes del accidente más Coco Martos, pero las versiones quedaron truncas al lanzarse como solista el ex tenor de los Tucu, Carlos Sánchez, editando un disco llamado “El amor es la vida”. El material, que salió a la venta en junio y fue presentado oficialmente el 8 de julio, cuenta con un estilo muy parecido al consagrado conjunto tucumano, pero con temas propios recopilados de distintas épocas de la carrera de Sánchez. “Miré a los costados y no encontré a mis compañeros de toda la vida”, fue la frase que envolvió a un ex Tucu Tucu golpeado física y anímicamente cuando pisó por primera vez, ayudado por un bastón, un escenario luego del accidente. Fue en el sentido homenaje que le brindó el conjunto humorístico QV4 la noche del martes 8 de enero en el festival de Doma y Folklore de Jesús María, en Córdoba.

La soledad, el vacío, el llanto de la gente y la emoción de poder cantar nuevamente fue el impulso principal para que Carlos Sánchez mantenga encendida la llama que dejaron Los Tucu Tucu y comenzar una nueva trayectoria, esta vez, como solista.

Escrito por: Jorge Daniel González

FUENTE: http://www.folcloreclub.com.ar/