Creado el 27 de octubre de 1982, por Decreto N° 1176 de la entonces Subsecretaría de Cultura del Chaco, el Museo de Bellas Artes René Brusau (MUBA Chaco) celebra este año su 30º aniversario.
Con sede propia dentro del edificio de la Casa de las Culturas desde 2010, el espacio cultural preserva obras de variadas disciplinas y los más destacados exponentes del arte chaqueño: creación e identidad dialogan con los visitantes como muestra contundente de la riqueza cultural que caracteriza a la tierra del “desierto verde”.
En el prólogo del catálogo de la muestra inaugural del MUBA, la profesora Miryam Romagnoli afirmaba: “Un Museo de Bellas Artes debe promover la creatividad. En oposición al viejo concepto de ‘depósito cerrado’, debe abrirse a nuevas perspectivas acordes con la vida contemporánea y contemplar múltiples posibilidades de investigación y expansión cultural. Debe ser un organismo dinámico y ‘vivo’, caracterizado por un accionar coherente que suscite interés y respeto. Su rol en la actividad creadora de la provincia ha de ser fundamental y tender al enriquecimiento del hombre moderno haciéndolo incorporar, naturalmente, el arte a su propia vida”.
Con ese estandarte, el museo, actualmente a cargo de Silvia Pescetto, genera, propicia y se encuentra a la vanguardia de los nuevos lenguajes en materia de exposición y promoción del arte. Con más de 45 muestras concretadas entre 2011 y 2012, algunas de ellas cogestionadas con Casa de las Culturas, el espacio cultural innovó en materia de promoción del arte y las distintas miradas enriquecieron este templo del arte chaqueño, sumadas a la posibilidad de animarse a grandes montajes y otras expresiones, gracias al espacio, presupuesto y nuevas tecnologías.
Desde 2011, la jugada se abrió tanto a la captación de mayor participación de artistas emergentes, como a la promoción un mayor protagonismo y compromiso de exponentes consagrados del arte chaqueño. A través de una convocatoria anual de proyectos, el MUBA invita a los artistas a ser parte efectiva de un presente histórico.
PATRIMONIO
El patrimonio del Museo de Bellas Artes René Brusau es producto del aporte de obras artísticas provenientes de la antigua Subsecretaría de Cultura y la pinacoteca del Banco del Chaco. En la actualidad, más de 500 obras de arte, de diferentes disciplinas, como dibujo, pintura, grabado, escultura y fotografía, tanto de artistas nacionales como provinciales, conforman una valiosa colección que parte cronológicamente de 1900.
El acervo abarca diferentes corrientes, propuestas y movimientos artísticos que cobran importancia en el plano histórico, ya que muchas representan escenas y paisajes que testimonian costumbres y hechos, evocan épocas, invocan ausencias, marcan presencias.
EXPOSICIONES TEMPORALES
Obras de artistas que, en su conceptualización, median entre realidades y ópticas disímiles, en tiempo y contexto común. Representantes de una época marcada por intereses e inquietudes, en manifiesto artístico-visual, gestando un nuevo orden identitario en la plástica local.
Pioneros reivindicados puestos en valor, y nuevos exponentes referenciados por las propuestas de sus coetáneos nacionales, coinciden en comunión plástica, como actores partícipes y necesarios en la cronología plástica chaqueña.
EL MUBA, EN CIFRAS
- 500 obras componen el patrimonio del museo.
- 700 visitas mensuales recibe cada exposición.
- 45 exposiciones concretadas entre 2011 y 2012.
- 30 años en la preservación y promoción del arte chaqueño
RESEÑA HISTÓRICA
Fue creado en octubre de 1982, con la misión prioritaria de transmitir a la comunidad el valor y significado del patrimonio artístico que conserva e investiga, difundiendo especialmente la plástica chaqueña y las tendencias actuales. Organiza numerosas muestras temporarias con la participación de artistas de la región y nacionales.
Desde sus primeras épocas, el Chaco se perfiló como tierra promisoria en materia de plástica. Personalidades destacadas como Rafael Galíndez, Crisanto Domínguez, Juan de Dios Mena, Yuyo Blanco Silva, Manuel Sanchís, así como también entidades culturales (El Ateneo del Chaco, El Fogón de los Arrieros) prepararon el terreno para un movimiento mayor. Posteriormente, con la creación de entidades educativas especializadas, como Taller de Arte Regional, Facultad de Humanidades y Academia de Bellas Artes del Chaco, se aceleró el proceso evolutivo.
En 1976, la Subsecretaría de Cultura inició una etapa de reconocida proyección para las artes plásticas en el Chaco. Se organizaron ciclos de exposiciones individuales y colectivas, con la participación de artistas locales, del interior y del resto del país. Las obras adquiridas por el gobierno provincial a lo largo de varios años incluyendo las que han sido donadas por personas y entidades identificadas con nuestro quehacer cultural, aguardaban un destino cabal: el Museo de Bellas Artes del Chaco.
El MuBA fue creado por decreto el 27 de octubre de 1982 e inaugurado oficialmente el 14 de abril de 1983. El 16 de junio de 1995, se llevó a cabo el acto de imposición del nombre: René Brusau, considerado uno de los precursores de la expresión plástica del Chaco en la década del ´40.
Su primera sede estaba en la avenida 9 de Julio 254 de la capital chaqueña: una modesta entrada y un espacio pequeño, pero lleno de actividades y por el cual transitaron grandes impulsores de la cultura local, como el mismísimo Ertivio Acosta, asiduo asistente de cada actividad propuesta.
Más tarde, Mitre 163 ampliaba las posibilidades de mostrar tanto el rico patrimonio como los nuevos artistas que surgían en la ciudad y la provincia. Finalmente, la itinerancia del Museo de Bellas Artes llegaría a su fin con su traslado definitivo, en 2010, al edificio de la Casa de las Culturas (Marcelo T. de Alvear y Mitre) donde actualmente cuenta con sala propia de exposición permanente de sus obras patrimonio y una sala de exposiciones que se van renovando mes a mes. Asimismo, el museo también se anima a nuevos espacios, interviniendo esporádicamente el hall de la Casa de las Culturas, con exposiciones tanto de carácter nacional como local.
BRUSAU Y EL CHACO
René Brusau, nombre que desde 1995 lleva el museo, es considerado como uno de los precursores de plástica del Chaco en la década del ‘40. Si bien nació en Villa María, Córdoba, en 1923 su figura se identifica totalmente con la plástica pictórica en el Chaco.
En 1943 se radicó en Resistencia, empleado como peón en Puerto Vilelas y Barranqueras para ganarse el sustento. El Ateneo del Chaco le confió la dirección de su Taller Libre de Artes Plásticas, luego dictó una cátedra en el Centro de Constructores y después cursos de dibujo y pintura en la Universidad Popular.
Hizo varios murales (El Fogón de los Arrieros, Casa Cimat), género por el que sentía particular entusiasmo. Incursionó en la escenografía teatral en obras del Teatro Experimental de El Fogón de los Arrieros.
En 1950, con Mena, decoró el Palacio del Mate (Posadas); decoró también el local del Chaco en la Feria de América (Mendoza); fue asesor de cuanta tarea plástica se efectuó en la zona. Obtuvo con su pastel "Niña" el Primer Premio del Salón del Litoral, Reconquista.
Tal y como reseña Lidia Polich de Calvo en el libro Hombres y mujeres que hicieron Chaco: “El nombre de René Brusau se identifica totalmente con la plástica pictórica en el Chaco. Fue la suya una existencia humanamente dolorosa; y como de éxtasis, dedicada al arte. Vivió y sintió el color y la forma en estado de pureza, reflejo de su alma y de su espíritu siempre dispuesto a brindarse a todos los rumbos. En su breve y densa vida "truncada tempranamente a los 33 años" dejó múltiples expresiones de su sensibilidad creadora”.
René Brusau falleció repentinamente en Resistencia, el 26 de junio de 1956, cuando tenía tan sólo 33 años de edad.-